www.remember-chile.org.uk

PORTADA

Pinochet para principiantes

La dictadura por dentro

Testimonios

Declaraciones

Noticias

Comentarios

Actividades

Enlaces

ENGLISH
Cartas
-
Comuniquese con nosotros
ESPAÑOL

El País, 23.2.00

Los países consultados sobre la liberación de Pinochet piden un nuevo examen médico. Jueces de Francia, Bélgica Suiza y España creen que el informe no revela incapacidad mental. ERNESTO EKAIZER / ENVIADO ESPECIAL, Londres

Los jueces de España, Francia, Bélgica y Suiza alegaron ayer ante el ministro del Interior británico, Jack Straw, que Augusto Pinochet, cuya extradición solicitan, está en condiciones de ser sometido a juicio y afirman que el informe médico realizado en el Reino Unido no demuestra la presunta incapacidad mental que se invoca para liberarle de forma inminente. El juez español Baltasar Garzón ha contado con un informe de ocho especialistas que coinciden en cuestionar el informe médico británico y en solicitar al ministro Straw la práctica de un nuevo examen médico.

El juez Garzón plantea en su escrito de alegaciones, que fue entregado en mano en la sede del Ministerio del Interior británico ayer al mediodía tras llegar en el primer avión procedente de Madrid, que el informe médico fue enviado el martes 15 de febrero "en condiciones de estricta confidencialidad" y que, "sin embargo, las autoridades del Ministerio de Asuntos Exteriores español al recibir el documento lo abrieron y han dispuesto del mismo en vez de remitirlo al juzgado", en referencia a la filtración que permitió la publicación del informe en varios diarios.

Según el juez de la Audiencia Nacional española, "con esa actuación aparentemente se ha quebrantado la confidencialidad exigida por el Home Office [Ministerio del Interior] y la High Court of Justice [Alto Tribunal de Justicia]", y deja constancia del hecho de que Exteriores "haya conocido e incluso comentado el documento, quebrantándose no sólo la confidencialidad sino también el secreto sumarial".

En las alegaciones, el magistrado destaca que los ocho peritos designados, que elaboraron su informe único y lo ratificaron ante el propio juez, expresan tres aspectos centrales sobre el informe realizado por los médicos ingleses:

- "No se presentan ni argumentos, ni evidencias que demuestren en el procesado alteraciones significativas de su capacidad de coordinación, recurso, retención, comprensión y entendimiento. Tampoco se aprecia la presencia de una alteración significativa de su estado de salud mental".

- "Consideramos que el examen médico practicado es limitado y parcial, faltando entre otros elementos una evaluación psiquiátrica y psicopatológica. El examen neurológico no demuestra daño cortical y subcortical diferentes de los que puede presentar cualquier anciano normal de su edad. Tampoco demuestra que los supuestos transtornos motores sean atribuíbles a lesión cerebral".

- "De la evidencia de los exámenes, se puede deducir que el señor Pinochet presenta un estado tanto físico como mental lo suficientemente normales como para afrontar cualquier situación incómoda, como puede ser la comparecencia en un juicio. Todo ello sin menoscabo de que nuevos exámenes clínicos pudieran demostrar lo que hasta ahora no se ha evidenciado".

Garzón agrega que "para garantizar la imparcialidad y evitar que se pueda dar cobertura con base a informes médicos incompletos, ausentes de todo control judicial, a una decisión irreversible de libertad de Pinochet, la única medida adecuada y procesalmente correcta es la de reconducir la cuestión médica al ámbito estrictamente jurisdiccional, al ser de esta naturaleza el momento en el que actualmente se halla el procedimiento de extradición". El juez señala que, de esa forma, si el Ministerio del Interior británico "declina la cuestión a favor de la autoridad competente" en el Reino Unido -o sea, en esta fase, el Alto Tribunal de Justicia-, debe permitir a la autoridad judicial española intervenir con sus propios médicos profesionales.

Y en caso de no atenderse esta petición, el juez pide a Straw la práctica "de un nuevo examen médico que incluya las diferentes especialidades implicadas y que se practique durante el tiempo necesario, para ofrecer unos resultados fiables".

Posiciones coincidentes

Ayer, asimismo, el juez belga Damien Vandermeersch, explicó en Bruselas que el análisis de cuatro expertos médicos de su país es "claro y desprovisto de ambigüedad", en el sentido de que "Pinochet está en condiciones de ser sometido a juicio". Bélgica es el país que con su recurso de revisión judicial logró que Straw fuera obligado a enviar el informe médico a los países que piden la extradición de Pinochet a fin de poder presentar comentarios.

El juez francés Roger Le Loire, por su parte, ha enviado una nueva comisión rogatoria a Londres en la que pide que médicos franceses puedan examinar a Pinochet. Y Suiza sostiene que "el informe médico enviado no aporta nada nuevo a las conclusiones que Straw ya había anunciado", por lo que solicita que el ex dictador sea enviado a España. "Suiza -dijo ayer a EL PAÍS Folco Galli, portavoz de la Oficina Federal de Policía, en Berna- ha subrayado a Straw, por otra parte, que reafirma su solicitud de extradición".

 

Straw promete estudiar las alegaciones cuidadosamente. E.E, Londres

Un portavoz del Ministerio del Interior británico dijo ayer, a preguntas de este periódico, que Jack Straw "estudiará cuidadosamente las alegaciones procedentes de los cuatro países". La decisión de Straw, que es suceptible de ser recurrida ante el Alto Tribunal de Justicia, puede ser adoptada esta misma semana, aunque las fuentes de Interior rehusaron adelantar cualquier calendario.

Tres de los cuatro países que alegaron ayer (España, Francia y Bélgica) coinciden en solicitar al ministro Straw la realización de un nuevo examen médico más completo con participación de médicos procedentes de cada uno de los citados países.

El cuarto país, Suiza, es el más radical, ya que le ha recordado a Straw que el Convenio Europeo de Extradición vigente no prevé el rechazo de una extradición por motivos de salud. Los jueces suizos y el fiscal general de Ginebra, Bernard Bertossa, enviaron el informe médico a especialistas suizos de diversas ramas de medicina. Sobre la base del rechazo de dichos expertos al informe médico británico, Bertossa y los jueces suizos han decidido rechazar el argumento de la salud para no entregar al ex dictador a España.

Especialistas

En Madrid, el juez Baltasar Garzón nombró a un médico forense adscrito al juzgado central de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Ángel Canelada, y a siete especialistas: Antonio Vázquez Rodríguez, jefe de sección de Neurología del Hospital Clínico de Madrid; Elena Bizcarrondo, psiquiatra; Tomás Palomo, jefe del servicio de Psiquiatría del Hospital 12 de Octubre de Madrid; José Luis Ayuso Gutiérrez, catedrático de Psiquiatría de la Universidad Complutense de Madrid; Jerónimo Saiz Ruiz, jefe del servicio de Psiquiatría del Hospital Ramón y Cajal de Madrid; Valentín Corces Pando, jefe del servicio del Hospital Psiquiátrico de Madrid y Francisco Ramos Campos, psicólogo clínico, profesor titular de la Facultad de Psicología de la Universidad de Salamanca.

Los ocho especialistas expresan su sorpresa por el hecho de que en el informe médico británico "no se emplean instrumentos de evaluación neuropsicológicos ni psicopatológicos que tengan un valor predictivo lo suficientemente alto como para poder confirmar ningún diagnóstico".

Según los expertos "sería conveniente repetir la exploración neuropsicológica utilizando un procedimiento más riguroso y con varias sesiones de una hora a lo largo de una semana".

Top of page