www.remember-chile.org.uk

PORTADA

Pinochet para principiantes

La dictadura por dentro

Testimonios

Declaraciones

Noticias

Comentarios

Actividades

Enlaces

ENGLISH
Cartas
-
Comuniquese con nosotros
ESPAÑOL

El País, 29.1.00

Querellas contra Matutes por no recurrir la posible libertad de Pinochet. Víctimas del golpe dicen que el ministro deniega auxilio a la justicia. J. M. LARRAYA/ J. M. LÁZARO, Madrid

El profesor de Sociología de la Universidad Complutense Marcos Roitman Rosenmann, víctima de torturas durante la dictadura chilena, presentó ayer en el Tribunal Supremo una querella contra el ministro español de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, por un supuesto delito de denegación de auxilio a la Justicia en el que habría incurrido al dar orden de no recurrir la decisión del ministro del Interior británico, Jack Straw, si éste se pronuncia por la liberación del general Augusto Pinochet por motivos de salud.

El querellante solicita al Tribunal Supremo que, como medida cautelar urgente, ordene al ministro de Asuntos Exteriores que transmita a la fiscalía británica instrucciones para recurrir contra la previsible decisión de Straw de denegar la extradición de Pinochet. A la querella de Roitman se suma otra contra Matutes y Santigado Cabanas, jefe del gabinete del ministro, y un recurso contencioso administrativo para que se obligue al Gobierno a recurrir la decisión si ésta es desfavorable.

El Tribunal Supremo pasó ayer mismo las querellas a informe del ministerio fiscal, que en los próximos días tendrá que pronunciarse sobre si el alto tribunal es competente y sobre si procede admitirla a trámite.

La querella de Roitman, interpuesta por el abogado de la acusación en el caso Pinochet, Joan Garcés, recuerda que el pasado 11 de enero el ministro británico del Interior, Jack Straw, actuando en funciones "cuasi judiciales y no políticas", acordó dar un plazo de alegaciones sobre su intención de interrumpir la extradición de Pinochet.

Garzón, como juez requiriente, respondió que no renunciaba "a que se agoten todos los trámites necesarios para hacer efectiva la extradición a España". Sin embargo, según el querellante, el embajador español en Londres confirmó al Home Office que el Reino de España no se proponía presentar recurso alguno contra la decisión que adoptase el ministro del Interior Jack Straw.

La querella enumera las diversas ocasiones en que el juzgado de Garzón reiteró las instrucciones de recurrir para defender la extradición española, sin que el ministro de Exteriores español las transmitiese a Londres, incluso cuando los fiscales británicos que defienden la solicitud española de extradición informaron a España de que era posible recurrir. El escrito de Roitman asegura que la tramitación de una extradición es una función de auxilio judicial obligatorio para las autoridades y para el Consejo de Ministro, y que la orden de no recurrir supone, de hecho, un desistimiento de la extradición, "lo cual le está absolutamente vedado al ministro español".

El querellante afirma que es el juez español Baltasar Garzón quien tiene exclusivamente competencia sobre la retirada de la solicitud de extradición, por lo que nos encontramos ante "una desobediencia o denegación del ministro español de Exteriores de dar debido cumplimiento a resoluciones judiciales".

Agrega que la Audiencia Nacional y los tribunales británicos "han hecho su contribución al desarrollo de este precedente judicial de persecución de crímenes contra la Humanidad", por lo que ahora corresponde al Tribunal Supremo español sancionar "a quienes están maniatando a la Justicia".

Matutes: "Golpe de efecto"

El ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, vio en la intención de los querellantes "un deseo de atraer la atención y de presionar de un modo inaceptable para condicionar las decisiones del Gobierno español en una materia tan sensible como la política exterior".

Matutes convocó a última hora de la tarde una conferencia de prensa urgente para dar respuesta a lo que calificó de "un golpe de efecto mediático para atacar una vez más un tema que está sobradamente asumido por la opinión pública". Aunque aparentemente tranquilo, dejó traslucir cierta irritación al referirse a algunas "afirmaciones difamatorias" de las querellas que, a su juicio, "desnaturalizan el papel respetuoso del Gobierno con la justicia".

El titular de Exteriores replicó a los querellantes que si el juez considera que el Gobierno ha vulnerado la legalidad, tiene a su alcance presentar un conflicto de jurisdicción, fórmula que hasta el momento no ha intentado.

En otro momento, el ministro afirmó que el Tribunal Supremo "sabrá distinguir lo que son decisiones que corresponden al ámbito judicial y decisiones políticas, en este caso humanitarias, que corresponden al ámbito de las relaciones entre Gobiernos".

Human Rights Watch acusa al Gobierno español de tratar de influir en Straw. JORGE MARIRRODRIGA, Madrid

"El Gobierno español ha tratado de influir políticamente en la decisión de Straw y ha mandado un mensaje a Chile para intentar reparar las relaciones con España", afirmó ayer José Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch (HRW), en relación con la decisión del Gobierno de José María Aznar de no apelar la decisión tomada por el ministro británico del Interior, Jack Straw, sobre el posible retorno del general Pinochet a Chile.

Según Vivanco, cuya organización con sede en Washington ha actuado en el caso Pinochet, "el Gobierno español ha sido inoportuno y me da la impresión de que el único objetivo ha sido ganar algún crédito ante Chile". "Aunque [el Gobierno español] está en su derecho a no recurrir la decisión de Straw, éste no ha decidido sobre el tema, sólo ha hecho unas conclusiones preliminares. Habría sido más prudente esperar, haberse comportado con mayor madurez, esperar a la decisión final de Straw", añadió.

Vivanco -que ayer se reunió en Madrid con el juez Baltasar Garzón y representantes del Ministerio de Exteriores- considera que, independientemente de que el ex dictador chileno vuelva o no a Chile, "el caso Pinochet es tan sólido que se ha ganado en toda línea", no sólo por la toma de conciencia internacional en cuanto a la persecución de los delitos de violación de los derechos humanos, sino por la evolución política en Chile a raíz de la detención y proceso al senador vitalicio. "Chile ha dado pasos inimaginables en el ámbito de la justicia. Se ha procesado a generales y se ha logrado consagrar una doctrina según la cual la amnistía no procede para delitos de desaparición forzada. Esto ha forzado incluso el diálogo entre sectores de la sociedad civil y los militares, algo impensable antes".

El director de HRW expresó ayer a Garzón su respaldo por la actuación en el caso, "en ocasiones a contrapelo del Gobierno", y considera que el gran mérito en el avance por la persecución internacional de las violaciones de los derechos humanos es mérito de la judicatura española y en especial de Garzón. "Creo en justicia que los aplausos y el mérito se lo deben llevar los jueces y en especial Garzón".

Ante las acciones emprendidas por el Gobierno de Bélgica para evitar que Pinochet pueda regresar a Chile, Vivanco destacó que esta iniciativa, "aunque tardía, es todavía útil". "Hubiera sido mejor cuando Garzón y la judicatura española estaban solos", añadió.

Texto completo: PROFESOR TITULAR DE LA UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID PRESENTA QUERELLA CONTRA EL MINISTRO ESPAÑOL DE EXTERIORES

Top of page